3 técnicas de pintura que no utiliza el pincel
La experimentación ha sido una de las formas para crear nuevas formas de expresar una obra de arte. De esta forma, se ha dado origen a nuevas técnicas y movimientos de arte que han revolucionado el arte y han dado la posibilidad de pintar de una manera nueva. En este artículo nos vamos a centrar en tres técnicas de pintura en las que no se utiliza el pincel para pintar.
Técnicas de pintura sin pincel
Técnica de Desgaste y Arrastrado
Esta técnica de desgaste y arrastrado consiste en aplicar la pintura siendo el medio el que dicte el resultado final de la obra, en lugar del pincel. Para ello se llevan a cabo dos procesos, en el primero se diluye en agua la pintura acrílica y echamos unas gotas de la pintura sobre el papel. Una vez tengamos manchas de pintura arrastramos la pintura con un palillo o un cuchillo de paleta. De esta forma, estaremos pintando sin utilizar ningún pincel
Por lo tanto, para esta técnica se necesita pintura acrílica, agua, palillos o cuchillo, y un trapo para limpiar.
El expresionista holandés Willem de Kooning y Gerhard Richter son dos de los artistas referentes en este tipo de técnica.
Pouring
Vertir distintos colores de pintura en una superficia para producir patrones inesperados. En eso consiste la técnica pouring, o también conocida como arte fluido, y supone una de las técnicas más experimentales de los últimos años y que cada vez tiene más seguidores. Para pintar con esta técnica se necesita pintura acrílica fluida, agua, y pouring medium.
Hay varias formas para aplicarlo, puede ser como Pouring directo, que consiste en la aplicación de la pintura en el lienzo formando charcos de pintura, y luego moviendo la superficie para ir creando las formas, y el dirty pour, en el que se emplea un vaso de plástico para echar la pintura. De esta forma, vas mezclando los colores de una manera más pausada.
Ebru Art o Marbling
Esta técnica de pintura se caracteriza por ser creada en una superficie acuosa y a través del que se consiguen dibujos similares a los patrones del mármol.
Para ello, necesitaremos el siguiente material: una superficie en la que poner el agua, cola blanca para espesar el agua, pintura al óleo, alfileres o utensilios finos, lienzo o superficie resistente al agua.
Cada pieza que creemos se trasladará al lienzo y se trata de una creación única. Por eso es tan importante cuidar el detalle y tener en cuenta el valor de cada dibujo que se realiza con esta técnica.
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